El mundo no se detiene, todo a nuestro alrededor está cambiando rápidamente. Ahora la gente es más agresiva que antes, pero a pesar de esto, el mundo todavía no está desprovisto de buenas personas.
La acción tiene lugar en un pequeño pueblo llamado Moskovskaya. Una vez, un residente local, Ilya Sadovnichy, fue a pescar temprano en la mañana.
El pez no fue capturado, por lo que el joven decidió dar un paseo por el bosque en busca de setas y bayas. Sabía bien dónde crecen los arándanos.
En algunos lugares, el área alrededor del agua estaba húmeda. Mientras caminaba, escuchó un suave chapoteo, cuyo sonido provenía del pantano.
Se acercó al pantano y vio a un gran perro Alabai tratando de acercarse a la orilla. Todos los intentos del perro fueron en vano, el pantano lo arrastró.
Debido al agotamiento y una larga estadía allí, el perro estaba exhausto y ni siquiera podía mover las piernas y ladrar. Simplemente se atragantó con el agua del pantano y se ahogó.
El hombre no dudó y se apresuró a ayudar al perro. El perro, atrapado en un pantano, no entendía lo que le esperaba, pero no quería dejar que su salvador se le acercara.
El perro intentó gruñirle, pero apenas tuvo fuerzas para hacerlo. Cuando el hombre se dio cuenta de que el perro estaba completamente agotado, aprovechó la oportunidad y lo llevó a tierra.
El socorrista lo pasó mal. Alabai es un perro grande y las piernas de Ilya están atrapadas en un pantano.
El perro yacía en la orilla durante mucho tiempo, sin moverse y respirando pesadamente. Luego, por fin, se movió un poco, se levantó, cojeó, ladró algo en señal de despedida y se fue.
El perro tuvo mucha suerte de que un hombre que trabajaba como maestro de seguridad en la escuela estuviera muy cerca y lo viera.
Todos en el pueblo los conocían a todos, y dos días después resultó que Alabai tenía un nuevo dueño. Se fue de vacaciones y llevó su animal a unos amigos del pueblo. Si fue interesante, compártelo con tus amigos y familiares.