Hace varios años, el Riverside Cemetery de Marshalltown, Iowa, dio la bienvenida a Blossom y Bud, una pareja inseparable de gansos, para que se alojaran en sus instalaciones. La alegre pareja sirvió de faro de esperanza a los visitantes del cementerio, sobre todo a aquellos que lloraban por el dolor de un corazón roto.
Lamentablemente, después de años de una admirable relación con Bud, Blossom se convirtió en otra víctima de la larga lista de corazones rotos que merodeaban los rincones del lugar.
En agosto del año pasado, el Cementerio de Riverside anunció con dolor la muerte de Bud, dejando a Blossom sola, vagando por los terrenos del cementerio en su dolor. La partida de su compañero fue un golpe repentino que destrozó a Blossom.
Con el paso de los meses, Blossom comenzó a superar su dolor por la muerte de Bud. El personal del cementerio se mantuvo en estrecho contacto con ella y se aseguró de que tuviera acceso a sus golosinas favoritas, haciendo todo lo posible para que nunca se sintiera sola.
Recientemente, algo cambió. Llegó un periodo del año en el que los gansos, como Blossom, empiezan a emparejarse con sus compañeras de toda la vida para tener una nueva generación de polluelos. Este instinto natural pareció abrir de nuevo la herida que había estado presente en el corazón de Blossom durante tanto tiempo.
A pesar de la desaparición de Bud, Blossom continuó su desesperada misión para descubrir su paradero. Sin embargo, todo lo que quedaba en este cementerio era la silueta etérea de Blossom, incapaz de encontrar ningún vestigio de lo que solía ser.
Conmovidos por el dolor de Blossom por la pérdida de Bud, los empleados del cementerio no podían quedarse de brazos cruzados. Aunque nada le devolvería la vida a Bud, sabían que ella aún tenía un corazón capaz de amar de nuevo, todo lo que necesitaba era un suave empujón para encontrar otra historia de amor.
Dorie Tammen, gerente general del cementerio Riverside, puso un anuncio con la esperanza de encontrar una pareja para Blossom. Pronto, se puso en contacto con una familia local que deseaba trasladar a su propio ganso, Frankie, de orígenes similares a los de Blossom.
El día de San Valentín, Blossom y Frankie tuvieron su primer encuentro. Con un poco de fortuna, podrían encontrar el amor que les ha sido esquivo durante tanto tiempo y disfrutar de muchos años felices juntos.
La historia de Blossom y Frankie es un hermoso recordatorio de que, incluso en medio del dolor y la pérdida, siempre hay esperanza de un nuevo comienzo y una nueva historia de amor.o como un nuevo amor.