Cuando el pequeño Arthur Bolzonella, de 10 años, subió al escenario de «The Voice Kids», no perdió tiempo en cautivar al público con su interpretación de un clásico de Bob Dylan. Fue una actuación poderosa que mostró su talento excepcional.
Para su audición a ciegas, el joven prodigio, Arthur, eligió interpretar el icónico tema de Bob Dylan, «Knockin’ on Heaven’s Door». Su elección de canción resultó ser la correcta, ya que los tres coaches giraron sus sillas en admiración. Finalmente, fue Louis Bertignac quien Arthur eligió como su coach.
La canción en sí ha estado causando escalofríos en la gente desde que apareció en la película de 1973 «Pat Garrett and Billy The Kid». Bob Dylan lanzó el sencillo «Knockin’ on Heaven’s Door» unos meses después, y rápidamente se convirtió en una sensación mundial.
No es sorprendente que la música de Bob Dylan haya seguido inspirando a numerosos artistas a lo largo de las décadas. Sus canciones permanecen intemporales y se transmiten de generación en generación, tal como lo hicieron para Arthur. Ciertas melodías tienen el poder de evocar emociones profundas, y el trabajo del legendario cantante Bob Dylan ha tocado corazones desde principios de la década de 1960, un legado que perdura hasta el día de hoy.
Hay algunas canciones que tienen la capacidad de llevar lágrimas a los ojos sin importar cuántas veces las escuches, y la letra de «Mama, take this badge off of me – I can’t use it anymore. It’s gettin’ dark, too dark for me to see – I feel like I’m knockin’ on heaven’s door…» es un ejemplo de ello.