La relación entre el príncipe William y el príncipe Harry ha sido tensa durante varios años. Aunque algunos esperaban que el diagnóstico de cáncer de la princesa Kate Middleton pudiera propiciar una reconciliación entre los hermanos, parece que la situación ha empeorado aún más.
Según una experta en monarquía, la reconciliación entre el príncipe William y el príncipe Harry sería improbable, especialmente después de la forma en que Harry y Meghan Markle se enteraron del diagnóstico de cáncer de la princesa.
Varios incidentes a lo largo de los años han fracturado la relación entre los príncipes, llevándola a un punto prácticamente irreparable, según expertos en asuntos relacionados con la familia real británica.
El biógrafo británico Omid Scobie señala en su último libro «Endgame» varias causas profundas de la rivalidad entre los hermanos, llegando a afirmar que «no hay vuelta atrás» en su relación.
Scobie describe el dolor y la ira entre los hermanos como cada vez más intensos, caracterizando su relación actualmente por la indiferencia y considerándola completamente irreparable.
El anuncio del cáncer de Kate Middleton conmocionó a los seguidores de la familia real, pero aunque apagó las especulaciones, surgen nuevas preguntas sobre la enfermedad y quiénes estaban al tanto de su diagnóstico.
Gabriella Morales-Casa, periodista especializada en monarquías, señala que el hermetismo en torno al estado de salud de Kate fue inusual, manteniéndose el diagnóstico en secreto incluso para el personal del palacio.
La experta considera improbable una reconciliación entre los príncipes William y Harry, especialmente considerando que los duques de Sussex se enteraron del diagnóstico de cáncer de Kate casi al mismo tiempo que el público, lo que podría haber aumentado la tensión en su relación.
Morales-Casa explica que Harry no fue informado directamente por William sobre el diagnóstico de Kate, sino por el rey Carlos, lo que refleja el distanciamiento entre los hermanos y la ausencia de comunicación directa entre ellos.
En resumen, la relación entre los príncipes William y Harry está marcada por la tensión y el distanciamiento, con pocas perspectivas de reconciliación en el futuro cercano.