Esta increíble historia habla de cómo una pequeña acción podría cambiar por completo una vida. Eran las 5: 30 a.m. cuando una adolescente y su madre tomaron un camino diferente al que suelen conducir a una reunión de intercambio en Illinois.
Kelsey y su madre apenas estaban despiertas, conduciendo sin cuidado cuando vieron a un caballo exhausto tendido a un lado de la carretera, muriendo de hambre, aferrándose a la vida. Entonces, sabían que tenía que ser una fortuna.
La adolescente notó de inmediato el cuerpo delgado de Sonny, luego dedujo directamente que Sonny no cabía en el remolque adjunto al automóvil de su madre. Sin dudarlo, la valiente adolescente caminó con el caballo demacrado las 9 millas completas de regreso a su casa y nada pudo detenerla de ayudar a Sonny.
A pesar de que Sonny y Kelsey llegaron y se limpiaron del largo y duro viaje después de 4 horas, Sonny necesitaba ser amamantado de inmediato y recuperar la salud.
La adolescente cariñosa estaba totalmente dedicada a su paciente, por lo que durmió en el granero chirriante durante 5 noches seguidas para asegurarse de que Sonny fuera agradable y se estuviera curando debidamente en su nuevo hogar. El tiempo pasa, y Sonny pudo comer más, correr más y disfrutar del tiempo en la tierra de pastoreo.
Kelsey se tomó muy en serio el proceso de recuperación de Sonny y formaron un buen vínculo. ¡Eso seguramente continuará para siempre!